MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) - 
   La presidenta del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) de Costa Rica, Eugenia Zamora, ha acusado este jueves al presidente del país, Rodrigo Chaves, de "amenazar la paz y la estabilidad" en el país centroamericano, en respuesta a las críticas del mandatario, quien asegura ser víctima de una "ley mordaza" por parte de la corte.
    "Cuando usted, faltando a la verdad, acusa un sesgo partidario en mis actuaciones y en las de mis compañeras y compañeros del Tribunal (...), está atacando la credibilidad de la institución que dirigimos, del proceso electoral que se avecina y del resultado de este que certificaremos", ha afirmado Zamora en un discurso publicado por el TSE. "Está amenazando la paz y la estabilidad política del país y eso es algo, le repito, que no podemos permitir", ha aseverado.
   La dirigente del TSE ha respondido de esta forma a las críticas contra la corte emitidas por Chaves, quien afirmó que el organismo judicial le imponía una "ley mordaza" por impedir la difusión por parte del Gobierno de información publicitaria relativa a su mandato durante la campaña electoral que comenzó el pasado 1 de octubre. El mandatario también acusó al tribunal de organizar un "golpe de Estado" por la solicitud a la Asamblea costarricense de retirarle el fuero, y a la propia Zamora de estar alineada con la oposición por haber trabajado en un Gobierno del Partido Liberación Nacional.
   "Es falso que el TSE esté sesgado en su contra. Cuidamos los votos a su favor en 2022, cuando sus correligionarios no eran suficientes para hacerlo en las mesas de votación. Declaramos la elección a su favor, porque fue la voluntad mayoritaria expresada en las urnas y eso para nosotros es sagrado", ha relatado la magistrada, que ha indicado asimismo que, desde entonces, la corte ha "admitido y también rechazado denuncias en su contra, siempre conforme a lo que en Derecho corresponde a los jueces".
   En este sentido, Zamora ha lamentado que la corte haya "pasado de merecer sus elogios a ser objeto de sus vituperios (...) sólo por cumplir" con su deber. "No podíamos incumplir nuestro deber de fiscalización del financiamiento de campaña, quedarnos de brazos cruzados cuando amenazó con un apagón de radio y televisión, o permitir que se transgredan las normas que en Costa Rica exigen la imparcialidad política", ha justificado, en referencia a tres de las decisiones judiciales por las que Chaves ha criticado al TSE.
   Asimismo, ha defendido su labor al frente del tribunal independientemente de su paso por la primera administración del expresidente Arias Sánchez, argumentando que "haber participado en algún partido político o servido un cargo durante un gobierno, no veta a nadie para la magistratura electoral en ninguna democracia del mundo". "En democracia la participación política partidaria no es una vergüenza, sino un sagrado derecho ciudadano, y haber servido un cargo durante un gobierno (...) no compromete a la persona con la agrupación política por la que se eligió ese gobierno", ha manifestado.
   "Flanqueada por mis compañeros magistrados (...) y acuerpada por 1.400 funcionarios electorales de amplia experiencia (...), dirigiré las elecciones nacionales 2026 y garantizaremos, una vez más, que las y los costarricenses puedan votar en un proceso electoral libre, en el que las leyes electorales se cumplan y la voluntad popular se imponga", ha asegurado.
   Unas horas después, la Asamblea Legislativa ha aprobado una moción de respaldo al TSE y en condena de los "ataques" de Chaves al mismo, según ha recogido el diario costarricense 'El Observador', con los votos en contra del oficialista Partido Progreso Social Democrático.
   "Como diputados y diputadas le damos el respaldo institucional que merece el TSE como la instancia que sustenta la legitimidad de los cargos públicos de elección popular", reza la moción en la que los representantes políticos han condenado "vehementemente los hechos de violencia política en contra de esta institución por parte de la presidencia de la República".
   El mensaje de Zamora a Chaves, que la presidenta del tribunal ha asegurado que será su "única manifestación pública sobre sus agravios", se produce a menos de un mes del inicio de la campaña electoral, en el marco del cual el TSE solicitó a la propia Asamblea la retirada de la inmunidad del mandatario, acusado de un delito de beligerancia política por supuestamente aprovecharse del cargo para favorecer una candidatura afín en las elecciones previstas para el 1 de febrero de 2026, en las que no puede postularse.