MONTERREY, NL 13-Oct-2023 (Agencia Reforma).
Ante la dura realidad en este mundo, la literatura para niños es apenas un "chochito" para lo que se enfrenta en la infancia, consideró el escritor y editor Daniel Goldin.
En la FIL Monterrey, Goldin dio hoy la conferencia "Acompañar. Sonata en Re: Nuevas meditaciones en torno a la historia de la infancia y de la literatura para niños".
"El vínculo entre la historia de la infancia y la historia de la literatura para niños, de entrada les digo, que es un vínculo absolutamente imposible, al menos en los términos en los que nosotros ilusoriamente, y creo que fatídicamente, estamos impuestos a postularlo", dijo.
"Todos nosotros queremos que de alguna manera lo que estamos haciendo en literatura para niños incida en la vida de los niños, queremos que los ayude a pensar en futuro, los eduque, les proporcione armas emocionales para vivir las inclemencias que se están viviendo en este mundo, los informe, vaya, que les ayude a pasar media hora, 15 minutos, una hora, una semana, mejor en el mundo. Y pasar una hora mejor en el mundo es bastante".
Como editor, Goldin es mayormente conocido por su trabajo en proyectos dirigidos a niños y jóvenes.
Fue director de la Biblioteca Vasconcelos en la CDMX y recientemente presentó una nueva edición de su libro Los Días y los Libros. Divagaciones en Torno a la Hospitalidad de la Lectura.
"Todos los adultos tenemos una idea de que hay algo que se les puede transmitir a los niños, de que vale la pena relatarles, que es importante, porque les va a hacer algo bien", siguió.
"() Y todos sabemos, incluso los que son fanáticos de la literatura para niños, que la literatura para niños es chiquitita, que hay unos libros maravillosos que nos han marcado, etcétera, pero que frente a la magnitud de la masa, de las necesidades de los niños, de los desafíos que implica la infancia, pues lo que hacemos es un chochito, una pastillita. Y bueno, seguimos en esto, vamos a seguir en esto".
Expuso que su intuición fue clave para desarrollar sus trabajos, pero ahora la perdió y por eso ya casi no está en el campo de niños y jóvenes.
Sin embargo, consideró que actualmente la literatura infantil no ha perdido su vitalidad.
"Creo que hay un montón de gente, jóvenes, autores, editores, promotores, mucho mejor preparados que lo que nosotros hacíamos, he visto cosas maravillosas", señaló.
"Incluso hoy ya se puede segmentar libros para niños y libros para los no hablantes".