MADRID 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado la imposición, a partir del próximo 1 de agosto, de aranceles del 30 por ciento para todos los productos de la Unión Europea.
"A partir del 1 de agosto de 2025, cobraremos a la Unión Europea un arancel de solo el 30% sobre los productos de la UE enviados a Estados Unidos, independiente de todos los aranceles sectoriales", ha hecho saber Trump a través de una carta publicada en su plataforma Truth Social y dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Como ha hecho en días previos con otros países, Trump ha anunciado que dará marcha atrás en su decisión "si la Unión Europea o sus empresas deciden fabricar productos en Estados Unidos".
"De hecho, haremos todo lo posible para obtener las aprobaciones de forma rápida, profesional y rutinaria; es decir, en cuestión de semanas", añade la misiva antes de avisar, también siguiendo el formato habitual que si por alguna razón la UE decide aumentar sus aranceles y tomar represalias, "la cantidad que elija para aumentarlos se añadirá al 30% que cobramos".
El lunes, en Bruselas, estaba previsto un consejo extraordinario de ministros de Comercio para tratar la respuesta al ultimatum de Trump, en una convocatoria previa al anuncio de este sábado. Ahora mismo, cabe recordar, EEUU impone un gravamen al 70 por ciento de las importaciones de la UE.
En todo caso, el jueves de la semana pasada, la propia Von der Leyen admitió que ya veía "imposible" llegar a un acuerdo "en detalle" antes del ultimátum inicial de Trump para 9 de julio, es decir, apenas 90 días después de iniciar las negociaciones, porque las relaciones transatlánticas entre la UE y Estados Unidos representan un "ingente" volumen de negocio --de 1,5 billones--.
Von der Leyen eludió hablar del nuevo ultimátum del 1 de agosto y abogó por cerrar un "principio de acuerdo" lo antes posible, siguiendo el ejemplo de los pactos de Washington con Reino Unido y Vietnam.
En la batalla comercial lanzada tras su llegada a la Casa Blanca, Trump activó aranceles del 50% sobre el acero y el aluminio europeo, de otro 25% sobre las importaciones europeas de vehículos y piezas y anunció otro 20% masivo sobre la mayoría de producciones restantes procedentes de la UE.
Con la tregua anunciada hasta el 9 de julio para dar margen a la negociación, el presidente norteamericano mantuvo en realidad los gravámenes sobre acero, aluminio y coches, si bien redujo temporalmente del 20 al 10% los otros aranceles, a los que Estados Unidos se refiere como "recíprocos" aunque no lo sean.